Fue espeluznante. Me disponía a dormir en la naciente madrugada del 11 de marzo cuando de repente leo en Twitter: "terremoto", "Japón colapsa", y tweets por ese estilo. Al principio pensé que eran cosas sin razón de algunas personas, pero esas similitudes iban en Umento y de diferentes usuarios. La duda corroyó mis ganas por dormir e hizo que cogiera el control y marcase CNN, lo que vi fue simplemente espantoso.
Las caras de Patricia Janiot y Fernando del Rincón eran impresionantes, no sabían que decir mientras pasaban las caóticas imágenes de cómo había sido el terremoto. Casas al suelo, oficinas en caos, gente traumada....9.0º Richter (hace poco confirmados) dejaron a la isla en stand-by.
Pero eso no fue quizás lo más sorprendente que vi, cuando comenzé a sintonizar CNN ya habían pasado casi 30 minutos del cataclismo y lo peor, y tal vez más destructivo, estaba por llegar. 1.45am hora peruana, CNN enfoca el mar de Sendai, silencio total...el mar retirado regresaba con unas olas gigantescas, la alerta de tsunami era inminente. Las olas chocaron con las costas de esa ciudad y no tuvieron piedad de nada. Arrasaron todo lo que a su paso encontraban, casas, carros, parcelas, puentes, carreteras: TODO. Los de CNN en español enmudecieron y sólo pasaban por su canal la señal de CNN internacional. El lodo (el agua ya estaba marrón) sepultó casi la mayoría de lo que pudo. Sorprendentemente, algo de lo que arrasó chocó comtra una planta procesadora de petróleo y provocó el incencio de un gran almacén.
Ya para ese entonces se me había ido todo el sueño y estaba sumergido en las redes sociales y comentando lo que sucedía con un par de amigos. Le había dicho a mi amiga Romina que esa planta explotaría en breve y justo diez minutos después se desató el infierno en Sendai. Las lenguas de fuego y el "hongo" formado me recordaron de inmediato el estallido de las bombas atómicas en Hiroshima y Nagasaki, espeluznante.
Todo era un caos: un inmenso incendio, una inundación incontrolable, destrucción masiva y el pánico popular.
Esa madrugada no dormí hasta las 4:19am cuando ya el sueño me consumía.
Al amanecer, encendí de nuevo la tele y todo ese día estuve concentrado viendo las imágenes, videos, testimonios, estadísticas y comentarios de expertos de todo el mundo por CNN. Llevaron la titánica transmisión a cerca de 48 horas sin corte, qué bárbaros.
Luego tema aparte fue, hasta ahora, la alerta nuclear. Resulta que una planta atómica en Fukushima se vio muy afectada por el cataclismo y los reactores atómicos comenzaron a fallar. El calor en esa planta se elevó en un 1000% más; colapsaron 2 reactores de los 5 con los que cuenta la planta nuclear. Caos mundial y preocupación en Asia Occidental. De llegar a explotar el 3º (que no falta mucho) se desataría la contaminación nu lear mediante una nube tóxica que viajaría por todos los países aledaños. Rusia ya se preparó, para evitar algo parecido a Chernobyl en los 70s. Sin embargo, eso es impredecible hadta que no se desaté la desgracia, Dios quiera que no.
El fuerte y devastador tsunami llevó a la alerta máxim en todos los países del Pacífico, llamado comúnmente el "Cinturón de Fuego"; Perú incluido. Las olas llegaban a las países sin mucha alarma, aquí también llegaron y provocaron un fuerte oleaje y la salida del mar en algunas zonas del vasto litoral peruano, preocupante. Lo que sí es para fomAr en cuenta es que nos hemos librado de al menos un leve sismo, situación que en definitiva preocupa a la gente por llegar a pensar que el suelo peruano está reteniendo la tensión y se podría liberar de forma trágica o alarmante.
Eso nos dejó y nos está dejando esta desgracia japonesa, que en definitiva ha tocado al mundo entero por el alto nivel de destrucción que dejó. Sólo nos queda rezar pidiendo que nunca nos pase algo semejante.
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